
Ayer sábado, más de 7.000 personas procedentes de diversas zonas de Galicia y comunidades autónomas vecinas se congregaron en la estación de A Gudiña para participar en una movilización masiva organizada por la Plataforma “Dereito ao Tren”. La protesta tuvo como objetivo exigir con fuerza la recuperación de los servicios ferroviarios de alta velocidad en la región.
Con pancartas y lemas reivindicativos, los asistentes denunciaron la grave situación de aislamiento ferroviario que afecta a numerosos territorios, caracterizada por horarios poco funcionales y una cobertura insuficiente que dificulta la movilidad de los ciudadanos. La manifestación reflejó una demanda común: la necesidad de un tren que realmente conecte a la población, con frecuencias adecuadas, horarios coordinados y conexiones eficientes con otros medios de transporte.
Durante el acto, los portavoces de la Plataforma agradecieron el respaldo recibido por parte de la ciudadanía, así como de colectivos sociales, y también de representantes institucionales de diversos ámbitos políticos, municipales, provinciales, autonómicos y nacionales.
Uno de los momentos más emocionantes fue la lectura de un manifiesto que destacó el compromiso con el medio rural, donde se escucharon frases como: «Esta es la primera de muchas movilizaciones hasta que recuperemos lo que nos arrebataron».
El presidente de la Plataforma, Rubén Riós, afirmó con firmeza que esta manifestación debe considerarse histórica por la cantidad de asistentes y la unidad política mostrada, aunque aclaró que el verdadero éxito llegará con la devolución de las frecuencias de alta velocidad que fueron eliminadas. Además, solicitó públicamente al presidente de Renfe, Álvaro Fernández Heredia, que pida disculpas por sus polémicos comentarios hacia los vecinos de la zona.
La jornada en A Gudiña fue más que una protesta; fue un grito colectivo por la dignidad y justicia territorial, una advertencia clara de que la sociedad no aceptará la marginación ferroviaria sin luchar hasta el final.